Las muelas carniceras son dientes de gran tamaño que se encuentran en algunos mamíferos carnívoros, usados para cortar carne y hueso en forma similar a las tijeras o las cizallas.[1] En cada masticación el desgaste por frotamiento de estas muelas hacen que se afilen continuamente una con otra, por lo que el animal tiene siempre estas muelas muy afiladas.[1] En los integrantes del orden Carnivora las muelas carniceras son el último premolar superior modificado y el primer molar inferior.[1] En los ya extintos creodontos, se ubicaban más atrás en el primer molar superior y el segundo molar inferior o en el segundo molar superior y el tercer molar inferior.[2]
La pérdida o ruptura de las muelas carniceras en un carnívoro salvaje (por ejemplo lobos y leones) puede precipitar la muerte del animal por inanición.